DICIEMBRE 2023. INICIO. La
arrogante millonaria Aura Llerena está acostumbrada a que su
voluntad y caprichos se cumplan, sobre todo desde que trabaja como
ejecutiva en la prestigiosa compañía de su padre, Leonardo, un
empresario de renombre y gran respeto, quien ha convertido a la mujer
en su consentida, lamentando que esté comprometida con Gabriel
Durán, un artista amigo de la familia, a quien él le tiene gran
cariño pero que considera poca cosa para su hija. No así piensa
Eugenia, la madre, una exitosa diseñadora de interiores, dueña de
una firma con gran reputación y por la cual no depende completamente
de su marido y en donde también trabaja su hija mayor, Dulce María,
la cual siempre ha dependido de ella, es enfermiza y se siente
menospreciada por su hermana, a la que oculta un gran secreto, lo
mismo que a la familia, pues al no poder tener los mismos atributos
que la mayor, se ha valido de su enfermedad para inventarse otras y
así tener la atención de la familia, saliéndose siempre con la
suya, mostrando un carácter calmado, mientras que Aura, tenaz y
aguerrida, demuestra ser inteligente y capaz, además de sentirse
orgullosa por su próximo casamiento con Gabriel, el cuál es popular
entre la alta sociedad y también el sueño de muchas, al igual que
ella, que siempre ha sido la obsesión de Bruno De la Mora, uno de
los ejecutivos de la compañía Llerena y que está casado con Rebeca
Noguera, por quien consiguió el trabajo. Sin embargo el hombre
siempre ha mostrado gran interés por la protagonista, quien al
percatarse de esto le exige que se aleje de ella o de lo contrario
hablará con su esposa. Esto lleva al hombre a tratar con desdén a
su cónyuge, quien desahoga sus pesares con la amiga, la cual le
aconseja que se divorcie.
Leonardo
tiene una hermana: la tía Mimí Llerena, quien desde que enviudó
quedó a cargo de él y tiene dos hijos: Ivana y Fabián Souberville.
El primero, ejemplar colaborador de la compañía y gran amigo de
Aura, mientras que la otra, una déspota hedonista que siempre ha
odiado y envidiado a su primas, a las que rechaza por considerarlas
unas arrogantes. Lo cierto es que Ivana siempre se sintió opacada, y
disfruta cuando descubre que Gabriel engaña a Aura con otra, por lo
que lo enfrenta y lo alienta a que hable con la verdad, antes de que
ella lo descubra ante todos.
En
una ciudad de provincia, Humberto Ramos agoniza, llenando de dolor a
su amada Isabel y a su única hija, Cristina, quien tiene un noviazgo
tóxico con Willy Corso, el cual siempre desea someterla a su
voluntad. Cuando el enfermo muere, la viuda descubre que también han
quedado en la ruina, por lo que se refugia en Eugenia, quien acude a
ella en compañía de Aura, quien se da cuenta de que su prima es
chantajeda y sometida por el novio, por lo que lo enfrenta,
demostrando de lo que es capaz. Ante estoy la ruina de las mujeres,
propone a su madre que las lleven a vivir con ellas y Eugenia se lo
propone a Leonardo, quien acepta y da la
bienvenida a su cuñada, quien sufre por haberlo perdido todo de la
noche a la mañana. A su vez Cristina es empleada en la compañía,
como secretaria de Fabián, aunque repentinamente se siente atraída
hacia Bruno, pues lo ve como un hombre al que siempre ha soñado,
distinguido, gallardo, guapo. De esto se da cuenta su jefe, quien le
pide que no ponga los ojos en aquél, pues es casado.
Aura
ha ocultado a su familia que hace tiempo tuvo amoríos con un hombre
mayor que ella: Diego Lafranco, el cual fue despedido injustamente de
la compañía gracias a ella, que al terminar su relación, para
comprometerse con Gabriel, quiso que el amante saliera por completo
de su vida. Sin embargo él no ha podido perdonarla ni olvidarla y la
hostiga, culpándola de la mala racha por la que atraviesa, debido a
su causa. Ante el rechazo de la protagonista, se desahoga con Vicky
Amezcua, una empleada amante de Bruno, por medio del cual se enteró
de las ordenes de la protagonista, a quien la mujer habla de lo mal
que lo pasa el ex empleado, sin que la millonaria haga algo, pues
asegura que el hombre fue responsable de su despido y ella solo hizo
lo que debía hacer.
El
apuesto Santiago Ramaglia es un empresario exitoso y millonario al
que Leonardo conoce y propone que se unan para crear una fundación.
El hombre se presenta en la compañía Llerena y conoce a Aura de una
manera accidentada en la que ella se porta grosera y déspota, razón
por la que él la pone en su lugar, sorprendiéndola, pues a
diferencia de los demás, la ha enfrentado sin saber quién es.
Cuando la mujer descubre que el hombre será socio de su padre, se
opone rotundamente y se vale de todos los medios para evitarlo,
incluso se vale de Eugenia y la tía Mimí, pero estas no logran
hacer cambiar de parecer a Leonardo. Por su parte Aura presiona a
Gabriel para que se casen y decide organizar una cena para que él
pida su mano, apoyada por el padre de este: Jaime Durán, un
anticuario, dueño de una galería, que sueña con ver realizado al
mayor de sus hijos, quien le revela que no ama a Aura y que hace
tiempo tiene una relación con otra mujer. Esto lo sabe la abuela
Esperanza, quien pide a su yerno, el anticuario, que no insista y
deje de presionar a su hijo y recomienda al nieto que hable con la
verdad a su novia y deje de ilusionarla. Entonces él se ve con Dulce
María, quien le aconseja lo mismo que su abuela. Se besan y son
vistos por Isabel, a quien la sobrina pide que calle, pues dentro de
poco Aura sabrá la verdad.
Rebeca
padece los maltratos de Bruno, quien está cansado de ella, que lo
amenaza con divorciarse y quitarle lo poco que tiene, recordándole
que no es nadie y que Aura nunca pondrá los ojos en un patán como
él. Acude al orfanato donde creció y se desahoga con la hermana
Teresa, a quien le dice ser muy infeliz. Esta le aconseja que pase la
noche en el recinto, pero la otra tiene miedo de la reacción de su
marido. Por ello vuelve a su departamento y prepara una maleta, para
irse lejos. Él la descubre y tras forcejear, la arroja al vacío,
por la terraza, cayendo la mujer a los pies de Vicky,
la cual queda perpleja al verla muerta y decide irse, mientras que el
responsable lo acomoda todo y al percatarse de que nadie lo ha visto,
sale del edificio, entre la gente que ya se ha congregado ante el
cuerpo de la occisa. Regresa y finge ante los policías estar
sorprendido, llorando por el deceso de su mujer, pasando como un
viudo bueno, servicial y que coopera con la justicia, valiéndose de
la misma Vicky, que confirma lo que este
dice, demostrándose que Rebeca era depresiva y ya había intentado
suicidarse antes. El crimen queda impune y, al saberlo Cristina se
acerca a él, mostrándole interés. Este de vale de la ingenuidad de
la muchacha para seducirla, despertando los celos de Vicky,
la cual le confiesa a Diego estar segura de que su amado tuvo que ver
en la muerte de su esposa, mas no se atreve a decírselo a la
policía, pues teme por su vida. Diego sin embargo está desesperado
y acude a Bruno para pedirle que lo ayude a recuperar su trabajo,
dejando entre ver que sabe lo que hizo, alarmándolo.
Fabián
tiene un romance con Darío Ronda, un colega de la compañía con el
que lo pasa bien pero que se niega a estar con él de manera
definitiva, por lo que el muchacho sospecha que le oculta algo y
decide seguirlo, descubriéndolo abrazando a una mujer y un niño,
por lo que se desilusiona y luego lo enfrenta en su oficina. Darío
le asegura que esa mujer es Karina Rueda, su hermana, y que el niño
es su sobrino. Lo besa, lo lleva a donde puedan estar juntos y le
hace el amor, convenciéndolo de que le dijo la verdad.
La
tía Mimí habla con Isabel y se asombra cuando a esta se le ocurre
decir que Gabriel juega con las dos hijas de Leonardo, para luego
cambiar la conversación y fingir que no ha dicho nada. Sin embargo
Mimí lo comenta con sus hijos e Ivana ríe al saber que no es la
única que sabe el secreto de Dulce María, asegurando que detrás de
la fachada de inocente y enfermiza de su prima, se esconde un ser
voluntarioso y cruel, capaz de quitarle el novio a su propia hermana.
Y no se equivoca, pues mientras que Dulce María se muestra frágil
ante los suyos, ya tiene un plan para irse lejos con su amado, sin
importarle que esto lastime a Aura, pues cree que de esta manera le
habrá ganado en algo.
Santiago
tiene otro altercado con Aura, quien revela sentir desprecio
hacia a él y, aunque intenta jugar con su mente, no lo logra, por lo
que enfurece, ya que el hombre no ha caído a sus pies para hacer su
voluntad, como el resto. No sospecha que el hombre en realidad se
siente atraído por su carácter y habla de ella con Bruno, quien lo
pone al tanto de las vidas de cada uno de los Llerena, así como le
habla del compromiso de la mujer con Gabriel, quien a su vez acude a
Leonardo y le hace saber que desea pedirle la mano de una de sus
hijas, por lo que el millonario convoca a toda su familia a una cena
en su casa, a la que Santiago está
invitado, haciendo esto pasar un coraje a Aura, quien está feliz,
pues su novio finalmente se comprometerá con ella y se casarán.
Paulo,
hermano menor de Gabriel, ha vuelto del extranjero para radicar en el
país de manera definitiva y esto llena de dicha a Esperanza, quien
lo entera de la situación de su hermano, al que el muchacho apoya en
todas sus decisiones, argumentando que, al contrario de Jaime, su
padre, al igual que a la abuela, a él nunca le ha agradado Aura.
Santiago
se atormenta con el recuerdo de su hermano, Enrique, quien lo
traicionara por una mujer y de quien no sabe nada desde hace tiempo.
No sospecha que su familiar también se encuentra atormentado por los
sucesos del pasado, pues la mujer por la que perdió a su sangre lo
ha abandonado al compararlo y saberlo distinto.
Isabel
pide a Dulce María que hable con Aura antes de que Gabriel pida su
mano, pues la ridiculizarán ante todos y le harán pasar un trago
amargo. Dulce María se opone rotundamente y asegura que ha llegado
el momento de que su hermana sepa lo que es perder y no poder tenerlo
todo en la vida, así que tendrá que tragarse su orgullo y saber
herida su vanidad. La desesperada tía cuenta lo que sucede a
Cristina, quien intenta hablar con su prima, pero no encuentra el
momento oportuno para decirle lo que sabe, mucho menos cuando Ivana
se presenta ante esta, momentos antes de la cena, para decirle que se
siente feliz por ella y por lo que vivirá luego de esa noche. Aura
sabe que su prima no la quiere, por lo que le pide que no sea
hipócrita, mas Ivana asegura que sus deseos son de corazón, pues
hace mucho tiempo que sabe que, lo que esta a punto de pasar, es algo
que Aura se merece.
Diego
busca a Aura y le pide que solucionen las cosas, pero ella lo
rechaza, así que el hombre la besa a la fuerza y son vistos por
Santiago, quien al darse cuenta de que la mujer se resiste al beso,
interviene para defenderla, sorprendiéndose cuando Diego le dice que
la mujer es su novia. Esta asegura que no es verdad y entonces
Santiago se encarga de ahuyentar al
otro, recibiendo un desplante de la protagonista, quien lo le
agradece lo que hizo por ella y, sin embargo, se siente preocupada y
habla con Vicky, a la que pide ayuda
para que el ex amante deje de atormentarla. La empleada le jura que
si ella le devuelve a Diego su empleo, hablará con él para exigirle
que la deje en paz, como un intercambio. Y así lo intenta, pero el
hombre no quiere solo su trabajo, sino que Aura vuelva con él. La
amiga le pide que recapacite y entienda que ella se casará con otro,
pero él no entiende razones y está más que decidido, presentándose
ante Gabriel para contarle todo.
Esperanza
aconseja a Gabriel para que tome una decisión definitiva respecto a
su futuro y si no se siente seguro de lo que siente por Aura,
entonces termine con ella. Sin embargo el nieto no desea herir los
sentimientos de la protagonista y considera que lo mejor que puede
hacer es continuar con ella. Se desahoga con Jaime, quien lo apoya y
le asegura que casándose con la muchacha afianzará su futuro y el
de su familia.
Santiago
ha hecho una gran amistad con Jaime y Esperanza, quien se
vuelve su confidente y el cual lo alienta para que busque a su
hermano y no ponga los ojos en Aura, en quien no confía. Lo deja
perplejo al decirle que está seguro de que la protagonista cegó con
su belleza a Gabriel y después hizo de él una marioneta que ha
manejado a su antojo, mas al ser presa de sí misma, de su arrogancia
y belleza, no se ha dado cuenta de que la ternura de su hermana Dulce
María ha logrado romper con el hechizo con que sedujo al prometido.
Jaime no está de acuerdo con esto e intenta defender a Aura, pero la
suegra insiste y considera que la chica es mala.
Cristina
revela a Isabel que está enamorada y tiene fe en que es
correspondida, pues cada día se acerca más a Bruno, quien solo la
utiliza para obtener información de la compañía Llerena y sacar
provecho, por lo que dentro de poco la besa y comienzan una relación
en secreto. Él la convence de que es mejor así, pues no quiere que
los Llerena piensen que es un arribista y está con ella por interés.
Luego él se sorprende cuando en su departamento aparece la hermana
Teresa, buscando a Rebeca. Le cuenta de su muerte y la monja se
marcha, pero el hombre la mira desde el balcón, observándolo. La
beata está convencida de que Rebeca no se pudo suicidar, pues la
noche que murió había decidido irse de la ciudad.
Mientras
los Llerena y los Durán cenan, Gabriel le pide a Leonardo que hablen
en privado y esto llena de ilusión tanto a Dulce María como a Aura,
quien al estar a solas con los suyos asegura que su novio es un
hombre maravilloso y que será muy feliz con él. El comentario
incomoda al padre y hermano de Gabriel, quienes solo cruzan miradas.
Pronto se escucha una fuerte discusión que asombra a todos, mucho
más a las hermanas Llerena, quienes bien salir a su padre furioso de
su despacho. Leonardo asegura a Aura que ha llegado el momento en que
demuestre de qué está hecha, pues debe ser más fuerte que nunca.
La mujer no entiende nada y aparece entonces Gabriel, quien le pide
perdón y anuncia que ha ido a pedir la mano de Dulce María, a la
que ama desde hace tiempo. La protagonista se resiste a creerlo y
Jaime se disculpa con Leonardo y Eugenia, apoyando a su hijo y
prometiendo que este y Dulce María se aman, que desean estar juntos,
pero han vivido con el temor de lastimar a Aura y enfrentarla. Esta
última, por su parte, asegura a los enamorados que no los perdonará
jamás. Sube a su auto y sale de casa, siendo descubierta por Diego,
quien la sigue para sorprenderla y reírse de ella, que le exige que
la deje tranquila, gritándole cuanto lo desprecia y confesando que
anduvo con él solo por calentura, no porque lo quisiera o tomara en
serio, pues no vale nada. Lo ofende de tal modo, que él se atreve a
abofetearla para que calle. Ella llora y cuando el ex le pide perdón,
ella asegura que llora de frustración, de rabia, no porque un
miserable como él la haya abofeteado. Lo humilla y se marcha. Recibe
una llamada de Santiago, a quien también ofende y, al perder los
estribos sufre un accidente y él acude a socorrerla, La lleva a un
hospital, cargándola en sus brazos. Ella no hace más que ofenderlo
y exigirle que no se meta en sus asuntos. Él le asegura que Gabriel
no es el único hombre y ante las respuestas y mal carácter de la
mujer, la besa por la fuerza y ella lo abofetea. Entonces él decide
llamar a Leonardo e informarle lo que ha sucedido, pero Aura no
quiere volver a casa y le pide que la lleve a otra parte. Él la
lleva a su hogar y la instala en una habitación, donde la mujer
llora amargamente por su frustración, mientras que Eugenia y
Leonardo reprochan a Dulce María lo que ha hecho. Ella les recrimina
pensar solamente en Aura y dejarla a ella en segundo término, sin
entender que no es así. Por otra parte, Fabián, Gabriel y Paulo
buscan a Aura y solo encuentran su coche, chocado y estacionado en
una calle. Temen lo peor y Gabriel se siente culpable. Sufre y tanto
su padre como su hermano le dan fuerza y le hacen ver que será feliz
con Dulce María, la cual en soledad maldice a Aura, pues ha amargado
su noche y ahora ha desaparecido para llamar la atención de todos,
incluso de su amado.
Cristina intenta hablar con ella, hacerle ver lo
que su hermana está sufriendo, mas a Dulce María no le importa y
jura que así Aura muera de tristeza, de rabia, de celos, ella se
casará con Gabriel, de quien la protagonista jura que se vengará y
al cual Esperanza felicita por lo que ha hecho, teniendo un roce con
Jaime, el cual está convencido de que la abuela influyó en la
decisión de su hijo.
Vicky
entera a Diego de lo que sucedió y este entiende por qué Aura se
encontraba tan alterada. Revela que la vio y que la golpeó, por lo
que la amiga lo reprende, mas este considera que ahora tiene una
oportunidad con ella, ilusionándose.
Santiago
hace saber a Leonardo que Aura está en su casa y que pasará unos
días allí. El angustiado padre entera a Eugenia y acude a su hija,
a la que abraza y pide que vuelva a casa pero esta no quiere ver a su
hermana, pues en el fondo solo desea abofetearla. Llora, no entiende
por qué la traición de Dulce María y Gabriel, y el progenitor la
consuela.
Darío
escucha a Bruno hablando con Cristina sobre información que desea
obtener y luego hace preguntas a la muchacha, quien finge no entender
de qué le habla y no cumple con el encargo del villano, quien
enfurece cuando ella no le da lo que quiere. La muchacha le dice que
Darío los escuchó y no se atreve a actuar a sabiendas de que el
empleado puede descubrirlos ante Leonardo. Por ello Bruno habla con
el otro y cuando este le dice saber lo que planea, lo amenaza,
exigiéndole que salga de su camino o Fabián sabrá que solo lo está
utilizando para ascender y que en realidad no es el apuesto gay
soltero y codiciado que siempre ha manejado ser en la compañía,
sino un charlatán que ha intentado engañar a todos y que en
realidad tiene familia y está casado. A Darío no le queda más
remedio que callar y cooperar con Bruno, luego de que este se atreve
a mandar a Karina una fotografía de Fabián, preguntándole si sabe
quién es ese hombre en realidad, lo que llena de temor al marido, el
cual está más cariñoso que nunca con Fabián, lo que despierta
sospechas en Ivana, quien no pierde la menor oportunidad para
burlarse de la relación de su hermano, lo que la lleva a discutir
con Mimí, quien le exige que cambie, deje de meterse en los asuntos
de los demás y se forje una vida propia. La muchacha se desahoga con
Raúl Becerril, su novio, el cual trata de acercarla a su madre, pero
ella se resiste, pues considera a su mamá responsable del abandono de
su padre.
Santiago
recuerda a Enrique e intenta comunicarse con él, sin éxito. Se
comunica a su antigua casa y la empleada, Gudelia, lo entera de que
el hermano se encuentra muy grave en un hospital, debido a una
sobredosis. Por ello el protagonista acude a su lado y cuando el otro
le pide perdón, con llanto, pues se dio cuenta de que su hermandad
no es comparable con la mujer que los engañó a los dos. Se perdonan
y prometen estar juntos.
Tragándose
el orgullo y valiéndose de su fuerza, Aura vuelve a casa con la
cabeza en alto, llenando de felicidad a Eugenia e Isabel. Temerosa,
Dulce María intenta hablar con ella y le asegura amar a Gabriel
desde que eran niñas. La hermana mayor le pide que no se preocupe,
le hace recordar cuando de niñas a ella ya no le quedaba un vestido
y se lo cedía, al igual que los juguetes. La lastima al decirle que
no le guarda rencor y que le cede a Gabriel como siempre le ha cedido
todo en la vida, pues ella obtendrá algo mejor. Las ha escuchado
Eugenia, quien consuela a Dulce María, la cual cree que su hermana
tiene razón, mientras que Aura, admirándose en un espejo de su
habitación, jura que no permitirá que el matrimonio entre su
hermana y Gabriel se realice. No cuenta con que la hermana sospecha
esto y por eso pide a Eugenia que apresuren la boda, mientras que el
prometido hace saber a los suyos que está dispuesto a todo por su
amada, aunque por ello se haya ganado el odio de Aura, a quien busca
para intentarle explicar cómo fue que se enamoró de la fragilidad y
dulzura de su hermana menor.
Esta lo abofetea y para olvidarlo decide
aceptar llevar a cabo un proyecto con Santiago y Bruno, quien a este
último intenta poner el pie en todo momento, mientras sigue su
relación con Cristina, a la que comienza a tratar con violencia para
luego disculparse. Ella intenta hablar con Fabián del miedo que le
da tener intimidad con un hombre, pero finalmente no se decide.
Santiago
confiesa a Enrique sentir por Aura una gran atracción, pero se
resiste a ella por no querer un compromiso y volver a salir
lastimado. Se encuentra con Jaime y le cuenta lo que siente, aspi
como le habla de la mujer que conoció en el pasado y con la que
estuvo a punto de casarse, hasta descubrir que esta lo engañaba con
su hermano, al que prefirió.
Esperanza
pide a sus nietos que tengan el valor para luchar por sus sueños y
se olviden de complacer a Jaime, el cual ya hizo su vida y no puede
exigirles que hagan la suya de acuerdo a sus expectativas. Los nietos
sin embargo no quieren defraudar al progenitor.
Bruno
se desfoga con Vicky, quien le pregunta si él no tuvo nada que ver
con lo que le sucedió a Rebeca, molestándolo en exceso, al grado
que él decide marcharse. Ella habla de esto con Diego, quien busca
al hombre para decirle que sabe lo que hizo y que está decidido a
callar a cambio de que le devuelva su trabajo para que él pueda
estar cerca de Aura. El villano se ríe de él, pues no le cree que
haya tenido que ver con la millonaria y le deja claro que él es
inocente de lo que le sucedió a su esposa, la cual era depresiva,
pero al verlo tan seguro de lo que dice no tiene más remedio que
acecharlo y luego de verlo cenar en un puesto de tacos, aguarda por
él y en una calle lo apuñala, matándolo.
Isabel
ayuda en las labores de la mansión Llerena y Eugenia le pide que no
lo haga, pues tienen sirvientes de sobra, sin embargo la hermana
necesita sentirse útil, por lo que es empleada en la firma de diseño
de interiores, donde por primera vez conoce lo que es un trabajo,
asesorada en todo momento por Dulce María, a quien intenta hablar
del daño que le hace a Aura. La egoísta chica insiste en que
Gabriel la ama a ella y se casará.
Santiago
se sorprende cuando al discutir con Aura, ella lo besa repentinamente
cuando se da cuenta de que Gabriel está cerca. El millonario le
corresponde y se asombra cuando la chica asegura que él es su nueva
pareja, por lo que decide invitarla a cenar pero ella rechaza la
invitación. Sin embargo, al estar sola, no puede evitar pensar en el
beso que se dieron, mientras que Gabriel siente alivio de que ella lo
haya olvidado. Desahoga esto con la abuela Esperanza, la cual le
asegura que las cosas están bien, pero en el fondo está convencida
de que la protagonista actuó dejándose llevar por la rabia, y así
se lo cuenta a Paulo, al que presiona para que forme un hogar.
Enrique
conoce a Aura y queda impresionado por su belleza, por lo que
comprende por qué Santiago está loco por ella. Sin embargo nota que
es una mujer fría y luego conoce a Bruno, con el que simpatiza y el
cual sigue amenazando a Darío, el cual no tiene más remedio que
colaborar con él y darle información privada que ha extraído de
los archivos de Fabián. El villano disfruta, convencido de que se
hará rico de la noche a la mañana. Intenta celebrar con Cristina,
quien se resiste a tener relaciones sexuales, por lo que él la
emborracha y abusa de ella.
Mimí
se siente desesperada por no saber qué hacer con Ivana y pide ayuda
a Raúl, quien le dice lo que la muchacha piensa de ella. La
preocupada madre desahoga esto con su hermano Leonardo, quien le
propone que la chica trabaje en la compañía, al igual que Fabián.
Cuando Ivana recibe la propuesta, se resiste absolutamente, pero
luego de conocer a Fabián y ver que este coquetea con Aura, quien lo
desprecia, decide aceptar.
ENERO
2024. La llegada de Ivana al emporio familiar resulta incómodo para
Aura, a la que acosa con preguntas y de la que llega a inventar que
es amante de Bruno desde hace mucho tiempo, llegando esto a oídos de
Gabriel, quien se lo reprocha a Aura cuando esta le vuelve a echar en
cara su engaño. En venganza, ella le hace saber que ahora tiene un
romance con Santiago, y cuando Gabriel la acusa de ser una
cualquiera, lo abofetea. Él la besa en un arrebato y ella le
corresponde, proponiéndole que se olvide de Dulce María y huyan
juntos. Él no dice nada y simplemente se marcha, dejándola
convencida de que aún la ama, por lo que la mujer intenta hablar con
su hermana, quien le reprocha el haberle quitado todo en la vida y
deja claro que no dejará que también le quite a Gabriel.
Cristina
sabe que Bruno la hizo suya sin que se diera cuenta y le reprocha lo
que hizo. Él le asegura que ella se emborrachó y se entregó a él
por voluntad propia. La chica se siente muy confundida y habla con
Aura, a la que confiesa que ama al hombre. La prima le pide que se
olvide de él pues está segura de que no es de fiar. Por esta razón
Cristina no le cuenta lo que ha sucedido y comienza a padecer el
desprecio del hombre, el cual muestra interés por Ivana, quien no
deja de coquetear con él, menospreciando a la otra.
Vicky
se entera de la muerte de Diego, la cual la policía cree que fue a
causa de un asalto. La mujer llora y da la noticia a Aura, quien
queda sorprendida y recuerda lo que vivió con el ex. Llora,
arrepentida de lo que le dijo durante su último encuentro e intenta
dar dinero a la empleada para que lleve unas flores a la funeraria o
el cementerio. Vicky la reta a que por primera vez tenga humildad y
sea ella misma quien acuda a dar el último adiós a quien le arruinó
la vida, injustificadamente. Las sorprende Santiago, el cual al ver
tan afectada a la protagonista, le ofrece su ayuda y esta le cuenta
lo que sucedió. Él la apoya y le dice no ser responsable de que un
ex haya muerto, más queda perplejo cuando sabe que ella se encargó
de que Diego perdiera su trabajo, para no tenerlo cerca suyo, por
temor a que su relación fuera evidente a los ojos de Gabriel.
Paulo
coincide con Fabián en un grupo de lectura y se siente atraído a
él, por lo que lo invita a beber algo. Al ir manejando ven a Darío
de la mano de Karina y cargando a un niño. Aunque el novio del
hombre está seguro de que la mujer no es otra que su hermana, a
Paulo esto no lo convence y decide ir a investigar a casa de esta,
descubriendo así que en realidad Darío lleva una doble vida. Lo
enfrenta y amenaza con decirle la verdad a Fabián, quien los
sorprende discutiendo y exige que le digan qué sucede pero ambos
callan. Esto sin embargo comienza a causar fricciones entre la
pareja.
Santiago
habla con Gabriel sobre Aura, enterándose así de que esta es
prepotente y voluntariosa y hará de su vida amorosa un infierno.
Bruno, que los ha sorprendido, asegura al millonario que la mayor de
las hijas de Leonardo es despreciable, sin embargo el villano está
ardido, pues de nuevo intenta besarla y ella lo abofetea,
amenazándolo con hacer que lo despidan. Esto lo ha escuchado
Cristina, a quien la prima le cuenta que Bruno siempre la ha
asediado. Luego hace una rabieta cuando al llegar a casa descubre que
han comenzado los preparativos para la boda de Dulce María, a la que
asegura que cometerá un error, pues si Gabriel se casará con ella
seguramente es por compasión, por saberla enferma. La mujer sin
embargo la reta a que lo comprueben y le pide que acepte que ha
perdido. Sigue con los preparativos, su vestido llega a casa y la
boda está en puerta. La desesperada Aura no sabe qué hacer y se
refugia en la tía Isabel, quien le exige que sea fuerte e intente
buscar el amor en alguien más. Ella se ve constantemente con
Santiago, quien se atreve a besarla, siendo rechazado una vez más.
Bruno
jura que se vengará de los desprecios de Aura y se sorprende cuando
la hermana Teresa aparece ante él y le dice saber que Rebeca no cayó
de la terraza, sino que fue asesinada, pues justo esa noche huiría
de la ciudad, escapando de él. Bruno reta a la beata, quien luego de
discutir con él se cruza con Vicky, a la que cuenta sus sospechas.
Esta le hace saber que ella misma presenció la muerte de Rebeca,
pues esta cayó a sus pies en el momento de su muerte y también
sospecha de Bruno. La monja le pide que la ayude a hundir a ese
hombre, mas la otra teme por su vida. Sin embargo al final es
convencida por la religiosa, a la que el villano comienza a acechar
hasta que se le presenta una oportunidad y al seguirla por las
calles, no se tienta el corazón para destruirla y la arrolla abordo
de su auto, afuera del orfanato. Huye al ver que está muerta y
maldice a Rebeca, pues su muerte le está trayendo problemas. Luego
busca a Vicky, para desfogarse, sorprendiéndose cuando esta lo
rechaza y le dice que ya no quiere estar con él ni ser su consuelo
cuando quiere desfogarse. Él la toma de los cabellos y la hace suya
por la fuerza, dejando claro que él decide cuando se termina su
relación.
Jaime
recuerda a su esposa y lo sorprende Esperanza, quien le pide que
apoye a sus hijos en cualquiera que sean sus decisiones, y no los
limite o presione, pues ellos le tienen gran afecto y confianza. El
hombre dice estar preocupado, pues solo desea un futuro prometedor
para ellos y teme a equivocarse como padre. Se consuela en brazos de
la suegra cuando esta le asegura que todo lo ha hecho bien.
El
día de la boda entre Dulce María y Gabriel llega y Aura está
decidida a impedirla a pesar de que Isabel y Cristina le imploran que
no lo haga. Ante su desesperación, la tía se lo cuenta a Santiago,
quien se encarga de impedir que Aura se levante en plena ceremonia
religiosa a impedir el casamiento. La saca del lugar, discuten y ella
lo abofetea, por lo que él de nueva cuenta la vuelve a besar
apasionadamente. Los ha visto Ivana, quien felicita a su prima por no
perder el tiempo y va acompañada de Bruno, incomodando a Cristina,
quien sufre al verlo con otra y se lo reprocha. Él le dice que solo
la usó y que la considera poca cosa.
Aura
sufre al saber a Gabriel perdido para siempre y Eugenia la consuela,
para luego pedirle que intente formar una nueva relación con alguien
como Santiago, pero la protagonista se resiste y revela a su madre
sentirse traicionada tanto por el que fuera su prometido como su
hermana vela, a la que sabe disfrutando de su ruina. Eugenia asegura
que esto no es verdad pero Aura sabe que sí lo es, pues Dulce María
siempre estuvo enamorada de Gabriel.
Santiago
se encuentra malhumorado y revela a Fabián que realmente está
interesado en Aura, mas no saber cómo acercarse de verdad a ella,
pues la sabe altiva, prepotente y caprichosa. El otro le aconseja que
simplemente le demuestre sus intenciones, sin esperar a que ella le
corresponda y sin mostrar tanto interés, puesto que quizás lo que a
esta enamore sea la indiferencia.
Vicky
es testigo cuando Bruno obliga a Darío a poner su firma en unos
documentos en blanco, luego de que se presenta ante Karina y su hijo,
como una amenaza. Al otro no le queda más que firmar, pero a la vez
también decide presentar su renuncia. Vicky da aviso de esto a
Fabián, quien se opone a que se vaya y discute con el villano, que
se ríe de él y le recuerda que no tiene el poder de detenerlo, pues
no es más que un títere.
Raúl
busca a Ivana y discute con Mimí, quien le exige que se aleje de la
vida de su hija. El vividor solo se ríe de ella y cuando la novia
aparece, ella se marcha con él, no sin antes prohibirle a su madre
que se meta en su vida.
La mujer acude a Eugenia y Isabel para
desahogarse y la cuñada le pide que hable con la verdad a sus hijos.
Mimí sin embargo cree que si todo se descubre, Ivana nunca se lo
perdonará.
Jaime
se sorprende cuando ante él se presenta Julio Soubeville, un amigo
del pasado y que desapareció años atrás. Este le dice estar al
borde de la muerte y querer remendar el daño que hizo en el ayer.
Luego sorprende a Mimí, cuando aparece ante ella y le confiesa que
no la ha olvidado Ella le exige que se marche y muera al lado de su
familia. Él le revela que el destino lo castigó, pues sus hijos
murieron en accidentes terribles y su esposa fue consumida por una
depresión y un cáncer incurable. Revela querer enmendar el daño
que hizo y Mimí lo rechaza, acusándolo de la muerte de su marido.
Bruno
ha cometido un fraude por varios millones de dólares, en el que
involucra a Fabián y Darío, los cuales son detenidos y encarcelados
hasta no demostrarse su inocencia. Esto da un golpe muy fuerte a
Mimí, a quien Ivana asegura que su hermano es inocente y está
decidida a comprobarlo. A la vez, este hecho hace que se descubra el
matrimonio entre Darío y Karina, lo que llena de profundo dolor a
Fabián, a quien el enamorado le pide perdón y al cual Vicky
confiesa que Bruno se encuentra detrás del fraude, mas no tienen
como comprobarlo. El muchacho habla con Aura, se lo cuenta, y le pide
que actúe de manera sigilosa para desenmascarar al villano. Ella le
pide ayuda a Santiago, el cual a su vez habla con Vicky, quien está
dispuesta a cooperar.
Dulce
María teme a que Gabriel se vea con Aura y los celos comienzan a
trastornarla, pues los manifiesta ante el marido, quien al verla en
una crisis se preocupa por el hijo que esperan. Le pide que acuda al
doctor y ella acepta pero le miente, pues en realidad no ve a nadie
más que a Eugenia, a la que asegura que Aura intentará arrebatarle
el amor de su marido. La madre habla con la hija mayor y esta le dice
no tener más interés en su ex, pero en realidad disfruta que su
hermana le tema y considera que sus celos enfermizos son el precio
que está pagando por haberla traicionado. La enfrenta y le asegura
que puede estar tranquila, pues jamás regresaría al lado de alguien
que la traicionó y le hace ver que lo que siente y piensa es
consecuencia de lo que hizo y con crueldad le asegura que su castigo
será tener siempre miedo a que su marido no la haya olvidado a ella
y tener que conformarse con simples migajas de amor, en caso de que
este no la quiera. La alterada Cristina corre a su hermana de su
presencia y Aura no hace más que sonreír con malicia, para entonces
acudir a llorar a solas, convencida de que su hermana enamoró a
Gabriel para arrebatárselo y hacerla sufrir, mas le hace fuerte el
saber que no sufre sola, pues la otra tampoco es feliz.
Esperanza
está convencida de que la presencia de Julio en las vidas de todos
solo causará conflictos, por lo que pide a Jaime que no lo ayude ni
crea en sus palabras, ya que lo sabe un mentiroso y arribista, capaz
de todo por ambición.
Bruno
ofrece alcohol a Enrique, quien se niega a beber y recuerda a la
mujer por la que perdió a su hermano alguna vez, justamente cegado
por la bebida. El villano le asegura que puede llegar mucho más
lejos que Santiago, si se deja guiar por él.
Cristina
descubre que está embarazada y llena de dolor se lo intenta decir a
Isabel, pero teme a su reacción. Se lo dice a Bruno, el cual le
exige que aborte y jura que la destruirá si se interpone en sus
planes. La muchacha sufre, intenta matarse cortándose las venas en
una tina, pero Isabel la descubre y lo evita. Al saberlo, Aura habla
con ella y se sorprende al saber su estado. La prima se niega a
revelar la paternidad de su hijo. Aura habla de esto con Santiago y
este sospecha de Bruno, con el que habla y deja claro que no
permitirá que se burle de una inocente como Cristina.
Por otra
parte, la convivencia y los enfrentamientos con Aura han provocado
que ambos sientan una fuerte atracción, por lo que han comenzado un
romance que se trunca ante el regreso de Gabriel y Dulce María,
quien revela a los suyos estar embarazada y a quien Leonardo deja
claro que no vivirá en su mansión y que debe instalarse con su
marido, en su propia casa.
Como
abogado, Paulo busca ayudar a Fabián de todas las formas posibles
mientras que Mimí suplica a Leonardo que haga algo por su sobrino,
pero el hombre se siente defraudado. Eugenia es quien escucha las
súplicas de su cuñada y pide al marido que crea en la inocencia de
Fabián, quien siempre ha demostrado ser de bien. Leonardo lo visita
en la cárcel y se asombra cuando el pariente le dice estar seguro
que Bruno se encuentra detrás del fraude. El millonario habla con
Santiago y este le propone que le tiendan una trampa a Bruno,
valiéndose de Ivana, quien se ha hecho su amiga y a la que el
villano ha convencido que Santiago es el responsable de que su
hermano esté en la cárcel, desatando esto fricciones y conflictos
entre la chica y Aura, quien se atreve a abofetearla luego de que la
caprichosa prima la ofende.
Santiago
habla con Karina, quien le cuenta de visitas que Bruno hizo a su casa
y como intimidaba a su marido, con quien el empresario habla para
pedirle que confiese lo que sabe. Este se quiebra y asegura que Bruno
lo tiene amenazado y teme por su familia, sin embargo Santiago y
Paulo lo convencen de decir la verdad. Darío acepta y tras declarar
que colaboró con Bruno y que este se encuentra detrás de los
fraudes, pues conoce las cuentas y contraseñas de las cuentas en que
se depositó el dinero. Tras ello, se suicida, con la convicción de
que con su vida habrá pagado a Bruno por su traición y este no
atentará contra su familia. SU muerte horroriza a Fabián, quien
recuerda cuando encontró a su padre muerto, en el despacho de su
casa, cuando él era un niño. Ante él se presenta Julio, quien le
promete que lo sacará de la cárcel, pues le debe un favor a su
difunto padre. Busca entonces a Leonardo y le ofrece lo poco que le
queda, como garantía de que responderá por su sobrino. El
millonario casi lo golpea y lo acusa de haber destruido la vida de su
hermana, con sus mentiras, engaños y falsas promesas. Aparece Mimí
para evitar que su hermano cometa una locura.
Ivana
tiene un altercado con Bruno, quien intenta hacerla suya por la
fuerza. Discuten y cuando él está por atacarla, es defendida por
Raúl, quien pide a la novia que le diga si ella ha sido cómplice
del hombre, a sabiendas de que este hundió a su hermano en la
cárcel. La muchacha asegura que se ha acercado a Bruno solo para
conseguir información, mientras que el villano es reprendido por
Leonardo, quien le jura que si se llega a descubrir que él se
encuentra detrás del fraude, del encarcelamiento de su sobrino y del
suicidio de Darío, no descansará hasta saber que lo lamenta.
Aura
y Santiago saben que se atraen el uno al otro y por ello, sin
quererlo, han comenzado una relación de verdad, lo que alegra a los
padres de la chica, pero no así a Gabriel, quien revela a su familia
que no ha dejado de amar a la mujer y que quizás haberse casado con
Dulce María fue una equivocación. Jaime le aconseja que entonces
luche por recuperar a Aura, pero Esperanza se opone totalmente y
advierte al nieto que, de romper el corazón de su esposa, se
enfrentará al desprecio de Leonardo y Eugenia.
Cristina
se horroriza cuando ante ella aparece Willy, quien le jura que ha
cambiado y desea estar con ella. La chica lo rechaza y aconsejada por
Aura se arma de valor para decirle a Isabel de su embarazo.
Desesperada, miente y asegura que el padre es Willy, al que luego
busca para reconciliarse con él y así montar una farsa. Sin embargo
Bruno se entera y la presiona para que aborte.
Los ha escuchado el
mismo Willy, quien al saber que el hombre utilizó a su enamorada,
jura que cobrará venganza. Lo acorrala e intenta matarlo, pero falla
sin percatarse de que el villano lo ha reconocido y luego lo ve
acompañando a Cristina.
Dulce
María se siente terriblemente mal y al notar que su vientre no
crece, se desahoga con Esperanza, quien intenta obligarla a visitar a
la Dra. Nora Salazar. La muchacha se opone, pero pronto, mientras
duerme, tiene un dolor terrible y Gabriel la lleva de emergencia a un
hospital, donde se descubre que no está embarazada, sino que tiene
en el vientre un tumor maligno y difícil de extirpar. Esto
conmociona a los Llerena y, sobre todo, a Gabriel.
Ivana
se asombra cuando ve en casa a Julio, el cual intenta acercarse a
ella, que dice estar segura de recordarlo de la niñez. Intenta hacer
memoria y pronto, mientras habla con Raúl, recuerda que cuando era
niña vio a ese hombre besándose con Mimí, a la que enfrenta y
acusa de ser una cualquiera que ha llevado a su amante a casa. La
madre la abofetea y con lágrimas le exige que calle y no la
atormente más.
Enrique
se lleva una gran sorpresa cuando al salir con Bruno ve a lo lejos a
la mujer por la que se alejó de su hermano. Nervioso, decide callar
ante el otro, que se ha dado cuenta de su estado y le vuelve a
ofrecer una copa que este acepta, alcoholizándose.
Aun
contra la voluntad de Leonardo, Santiago insiste en ayudar a Fabián,
quien al hacer tratos con Paulo descubre a un chico de carácter y
protector en él. El tío del muchacho insiste en acusarlo y por ello
discute con Mimí, quien le reprocha el negarle su ayuda, a la par
que entera a Eugenia y Isabel del regreso de Julio, quien al visitar
la compañía se cruza con Bruno, al que ignora totalmente. El
villano intenta escuchar lo que el visitante discute con Leonardo,
pero Cristina lo impide y le vuelve a hablar de su embarazo,
convirtiendo esto en una discusión, pues ella ha decidido tener al
bebé. Los ha escuchado Ivana, quien entera a Isabel con el fin de
causar alboroto. Y lo logra, pues a la madre de la embarazada no le
agrada Bruno, al que Julio encara más tarde, en su departamento,
cuando lo visita para exigirle que deje la compañía, revelándose
que son padre e hijo, cuando el malvado asegura que destruirá a toda
la familia de la mujer que hizo sufrir a su madre y los destruyó a
ellos como familia. Tras esto, vuelve a intentar besar a Aura, quien
lo desprecia y le confiesa el repudio que siempre ha sentido hacia
él, así como creerlo culpable del desfalco en la compañía. Le
deja claro que nunca le corresponderá y habla con Eugenia de esta
situación. Al saber por Leonardo que Bruno es hijo de Julio, la
mujer habla con Mimí, quien se encuentra desesperada, así que
decide hablar con el empleado y se alarma al verlo besándose con
Ivana. Le exige que la deje pero la muchacha le pide que no se meta,
así que Eugenia amenaza a Bruno con decirles a todos cual es su
verdadera identidad si no se aleja de su familia. Pensando en el
rechazo de Aura y en las amenazas de Eugenia, el villano decide dar
un escarmiento a la primera, causando la muerte de la segunda, cuando
envía a alguien a citarla en un lugar con el pretexto de una
remodelación y ese lugar explota, mandándola al hospital.
Vicky
se ha puesto en marcha, decidida a encontrar las pruebas que
desenmascaren a Bruno, quien se ha dado cuenta de su traición. Por
ello la trata con ternura y le dice estar arrepentido de haberla
forzado a tener relaciones. La invita a cenar y le jura que nada
sucederá entre ellos, mas solo quiere disculparse. Ella rechaza la
invitación pero él ejerce tanta presión que no tiene más que
aceptar. No sabe que ha caído en una trampa mortal pues durante la
cena, recibe llamadas de Santiago, por lo que se disculpa para ir al
baño y contarle lo que hace, sin sospechar que el villano le ha
puesto una sustancia en la copa de vino. La va a dejar a casa y al
dormir muere envenenada, retorciéndose de dolor.
Santiago
reprende a Enrique por haber retomado la bebida y el hermano le
oculta que ha visto a la mujer que los separó. Se violenta y dice
estar harto de su situación y haber encontrado en Bruno a un amigo.
A este acude Santiago, exigiéndole que se aleje de su hermano, pues
sabe que desea dañarlo através suyo. El villano solo se ríe de él.
Aura
y Dulce María están más unidas que nunca para apoyar a sus padres,
sobre todo a Eugenia, quien agoniza en el hospital, hasta morir,
llenando de dolor a los suyos, que la despiden con una ceremonia a la
que Bruno acude para dar el pésame. Aura lo acusa de ser un
hipócrita y ante todos lo responsabiliza de los fraudes en la
compañía. Él a su vez se ha acercado a Karina, con la que intenta
entablar una relación, siendo rechazado, por lo que se violenta con
ella, al grado que le revela que Darío era bisexual y mantenía una
relación con Fabián, a quien la mujer visita en la cárcel para
confirmarlo, tomando así la decisión de irse de la ciudad.
Willy
insiste en volver con Cristina y ella lo rechaza. Bruno descubre esto
y se burla de la chica, quien sufre por sus ofensas. El villano sin
embargo es enfrentado por el ex de esta, quien le dice saber que él
es el padre del hijo que espera. Le pide una fuerte suma de dinero a
cambio de no hablar con Leonardo Llerena, a quien seguramente
enfurecerá el que su empleado se haya enredado con sus dos sobrinas.
Bruno se siente acorralado.
Santiago
invita a Enrque a trabajar con él, bajo la condición de que se
aleje de Bruno. Se sorprende ante la ausencia de Vicky en la compañía
y decide ir a buscarla, sin poder encontrarla. Luego se estremece
ante la aparición de Nubia Páramo, la mujer con la que hace años
se casaría, pero lo engañó, y que no está dispuesta a perderlo.
La presencia de la mujer pone en alerta a Aura, a quien Isabel le
aconseja que no se permita perder a otro hombre y la entera de que
Gabriel es infeliz al lado de Dulce María, quien debe vivir con el
doloroso tumor y, llena de amargura, también a él le hace la vida
miserable. El hombre se refugia en el arte, en su padre, su hermano y
su abuela. Los varones le hacen ver que fue un error casarse con la
enferma, la cual sufre con la pérdida de su madre, ya que era su
único apoyo, mientras que la abuela le pide que sea fuerte y
enfrente todas las adversidades con coraje. Le suplica que, por el
estado de su esposa, no se confunda y vuelva a los brazos de Aura,
quien solo puede perjudicarlo.
Mimí
habla con Raúl y este cuestiona a Ivana sobre su relación con
Bruno. La chica se sorprende todavía más al saber que su novio
ocupará el lugar de Fabián en la compañía. Lo primero que el
hombre hace es revisar los números junto con Aura y Santiago y los
tres deciden poner una trampa a Bruno, quien se percata de esto y
exige a Cristina que investigue pero ella no está dispuesta a
ayudarlo más, así como tampoco a deshacerse del hijo que espera.
Discuten y al tardar el ascensor, ella decide bajar por las
escaleras, desde donde él la empuja al vacío, logrando que pierda a
su hijo, pero lo que Bruno no sabe es que alguien lo ha visto.
FEBRERO
2024. Jaime asegura a Mimí que Julio está arrepentido y no ha
dejado de amarla. La mujer se refugia en Isabel, quien le pide que
les diga la verdad a sus hijos. Pronto Ivana descubre a su madre
hablando con el hombre y discuten. Luego ella visita a Fabián y le
cuenta de la presencia de este, sorprendiéndose cuando el hermano le
revela que él recuerda haber visto cómo su padre se disparó a sí
mismo, perdiendo la vida. Pide a Ivana que investigue, pues aunque su
madre les ha dicho que murió tras haber quedado en la ruina, lo
cierto es que ellos siempre vivieron cómodamente.
Enrique
tiene un encuentro con Nubia, quien se ríe de él y le recuerda ser
muy inferior a Santiago. El ex amante la sacude y le jura que si no
los deja tranquilos entonces cumplirá la amenaza que un día se
hizo: Matarla. Ella, sarcástica, le insinúa que no tiene las
agallas suficientes y le deja claro que regresará con su hermano y
se casará con él, por lo que, tras ello, de nueva cuenta se
encargará de separarlos.
La
salud de Dulce María empeora cada vez más y por ello se ve en la
necesidad de volver a casa, donde Isabel la cuida. Esta situación
hace que Aura y Gabriel deban convivir y él trate de acercarse a
ella, pero la mujer lo rechaza, pues se ha enamorado de Santiago,
quien a su vez se ve con Nubia para dejar claro que su relación ya
no puede ser, pues él está enamorado de Aura. Sin embargo Nubia
conoce a Bruno y se hacen amigos, por lo que deciden separar a los
enamorados, ya que él se ha obsesionado con Aura, a quien Cristina
le revela estar convencida de que Bruno la empujó por las escaleras
con la intención de que perdiera a su hijo. A la par de esto, la
protagonista se asombra cuando recibe una llamada para enterarse de
que el cuerpo de Vicky fue hallado en estado de putrefacción. Entera
a Santiago, quien teme a que la empleada haya sido asesinada.
Fabián
y Paulo se dan cuenta de la atracción entre ambos y se besan. El
rumor se esparce dentro del reclusorio, donde algunos presos se
burlan de Llerena, provocando esto que el Escorpión, un recluso con
influencias, ponga los ojos en él y se valga de Jano, uno de sus
secuaces, para molestarlo.
Bruno
e Ivana no pueden evitar la fuerte atracción que existe entre ellos,
por lo que él la hace suya. Ella descubre en el hombre a un amante
ardiente que la enloquece y le propone que estén juntos y compartan
su odio por las mismas personas. Se besan, apasionados, y luego él
se asombra cuando Aura se presenta para preguntarle cual era la
relación lo que él y Vicky sostenían, enterándolo de que el
cuerpo de esta fue hallado muerto. El villano le exige que no se meta
en sus asuntos y asegura que la occisa no era más que una simple
empleada. Ella le dice no creerle y junto con Santiago habla con
Jaime de sus sospechas hacia Bruno y de lo que este le ha hecho a
Cristina, lo que el hombre comenta con Julio, quien busca al villano
y le exige que desaparezca de la vida de los Llerena, los cuales no
tienen la culpa de lo que él sufrió. Pero Bruno ya está decidido y
revela que hace años él provocó la muerte del marido de Mimí,
pues le mostró pruebas que comprobaban que su esposa y Julio fueron
amantes y que Ivana era fruto de ese adulterio. No saben que, por
accidente, Enrique los ha escuchado.
Esperanza
pide a Dulce María que sea fuerte y luche por sobrevivir, dejándole
entre ver que entre Aura y Gabriel aún hay atracción y estos
podrían estarse entendiendo. Su indiscreción altera a la enferma,
quien desesperada suplica al marido que le jure que ha olvidado a su
hermana. Este calla y ante la presión de su abuel no tiene más
remedio que aceptar que Aura ha quedado en el pasado y no siente nada
por ella. Luego discute con Esperanza, a la que reprocha el haber
alterado a su esposa. La abuela le dice estar segura de que no ha
olvidado a Auro y le afirma que ese amor será su destrucción.
Cristina
tiene una discusión con Willy, quien insiste en que estén juntos e
intenta obligarla a irse con él. La muchacha es defendida por Raúl,
con quien se desahoga y le hace saber de su atracción por los
hombres tóxicos y del amor que sintió por Bruno. El amigo pide a la
mujer que, si sabe algo, coopere para que el hombre que le ha hecho
tanto daño, pague, y ella les cuenta a Leonardo y Santiago de como
el villano le pedía ayuda para tener acceso a las cuentas. Descubren
así una cuenta privada que Bruno tiene y descubren que fue él quien
cometió los fraudes, con la ayuda de Fabián, quien desde la cárcel
coopera, esperanzado a quedar en libertad, haciendo amistad con
Claudio Robledo, otro inocente acusado injustamente.
Sin embargo el
Escorpión y sus secuaces lo sorprenden en las regaderas y el primero
lo obliga a hacerle una felación para después violarlo, siendo
golpeado por sus hombres, a continuación.
Aura
intenta acercarse a Dulce María pero esta insiste en rechazarla,
pues cree que solo espera su muerte para estar con Gabriel. La
hermana mayor lo niega y le dice agradecerle el haberla ayudado a
abrir los ojos, pues su amor por el hombre solo fue una fantasía que
tuvo desde la niñez, pues ahora al lado de Santiago sabe que nunca
estuvo realmente enamorada. Gabriel las ha escuchado y sufre, a la
vez que recibe una propuesta para trabajar una temporada en el
extranjero. No sabe qué hacer, puesto que no tiene corazón para
dejar sola a su esposa, ahora que el tumor ha empeorado su salud.
Busca consejo en Paulo y los escucha Esperanza, quien se presenta
ante Aura para exigirle que deje en paz a su nieto y acepte que lo ha
perdido y este es esposo de Dulce María, atreviéndose a hacerla
responsable de la enfermedad de la hermana.
Jano
se da cuenta de que Fabián y Claudio son amigos y cree que tiene
tendencias homosexuales. Se burla de él para luego intentar
intimidarlo en las regaderas, donde lo toca la lascivia. El otro se
defiende y esto hace enfurecer al criminal, quien le cuenta lo que
sabe al Escorpión, el cual sonríe de manera malévola y asegura que
él será el primero en deshojar esa flor, en el reclusorio. Intenta
ponerle una trampa para violarlo, pero Claudio lo descubre y logra
impedirlo, por lo que Jano lo golpea.
Enrique
le cuenta a Santiago lo que escuchó decir a Bruno y luego se lo dice
a Nubia, durante una discusión, poniéndola al tanto de lo que
ocurre en la compañía Llerena y de la trampa en la que Bruno ha
caído por parte de Santiago, por lo que será detenido por la
policía. Ella pone en alerta al villano, el cual decide darse a la
fuga, pero también secuestrar a Aura, percatándose de esto Gabriel,
quien intenta defenderla sin éxito, dando esto, como consecuencia,
una persecución, ya que va detrás de Bruno y su cuñada, ambos
abordo de un auto. Ya en la carretera, Bruno se detiene y cuando
Gabriel desciende de su auto para rescatar a Aura, es sorprendido por
la espalda, por su enemigo, quien le dispara en la cabeza para
entonces llevarse con él a la mujer. Sin embargo no ha matado a
Gabriel y este ha quedado en coma, en el hospital, lo que llena de
miedo a Dulce María, ya que, gracias a las intrigas de Ivana, piensa
que su marido y su hermana estaban huyendo juntos. Sin embargo Aura
lucha contra Bruno, quien le asegura que lo amará y será suya,
aunque sea a la fuerza. Amenaza con matar a su familia, por eso la
obliga a comunicarse con ellos y decirles que está bien y ha
decidido tomar unas vacaciones. Por este motivo el villano puede
volver a la compañía, decidido a extraer todo el dinero posible,
sin importarle llevar a la ruina a Leonardo. Al sospechar esto, Raúl
habla con Mimí delante de Julio, quien busca a su hijo y le exige
que se detenga. Ante la negativa de este, el hombre cuenta a Mimí
que Bruno es su hijo y hace años que planea vengarse de su familia
por lo que existió entre ellos en el pasado. La mujer desea enterar
a su hermano pero Santiago lo evita, luego de que ante tantos
disgustos Leonardo sufre un ligero ataque al corazón. La mujer
cuenta todo al socio de su hermano y este busca al villano, al que
amenaza con llevarlo a la cárcel. Se hacen de palabras y Santiago lo
golpea, para entonces exigirle que le diga donde está Aura, pues
sabe que viajaba con Gabriel y este les ha contado todo, puesto que
no murió. Asustado, Bruno huye de la ciudad y al estar con Aura, la
obliga a que llame a su padre y le pida una fuerte suma de dinero. La
mujer sin embargo reacciona y al escuchar la voz de Santiago, le dice
donde está. Bruno la abofetea y en un descuido suyo, ella logra
desatarse las manos toma el arma del hombre, con la que sin pensarlo
le dispara, jurando que lo matará como un perro. Logra escapar sin
cerciorarse de que el villano en realidad haya muerto y, asustada, en
la carretera se encuentra con Santiago, a quien le dice lo que ha
hecho.
Van al lugar de los hechos y descubren que Bruno no está.
Ella levanta una denuncia y a la vez Raúl, que odia a Bruno por
creerlo el amante de Ivana, en un afán por hundirlo logra reunir
pruebas que demuestran que este cometió el fraude, por lo que tras
pagar una fianza, Fabián queda en libertad, llenando de felicidad a
su madre y también a Paulo, al que rechaza, pues no deja de pensar
en lo que le hicieron en la cárcel. Su dolor crece cuando Mimí le
revela que que él y Ivana no son hijos del mismo padre y que la
chica es hija de Julio, por lo tal, hermana de Bruno. Cuando el
muchacho se entera por Raúl de que su hermana sostenía amoríos con
el malvado empleado, se horroriza y la busca, sacudiéndola para que
le diga si es verdad. Ella lo acepta y él se lo cuenta a Mimí,
quien se desahoga con Isabel, la cual le aconseja que hable con su
hija antes de que esta cometa un disparate. Una discusión entre
hermanos ocasiona que Ivana sufra un desmayo y cuando la Dra. Salazar
le hace un chequeo, se descubre que está embarazada.
Willy
insiste en acosar a Cristina y extorsionar a Bruno, quien contacta a
la chica y le pide ayuda, jurando estar arrepentido y desear que
estén juntos para siempre. Ella no le cree pero decide seguirle el
juego, por lo que habla con Aura y Santiago y los tres planean
tenderle una trampa al malhechor, quien está siendo ayudado por
Nubia, quien se hace su aliada y amante con el único fin de destruir
a Aura y Santiago, quien la ha despechado, dejándole muy claro que
no la ama ni volverá con ella, que sigue acercándose a Enrique para
enterarse de los movimientos del protagonistay habla con Ivana, quien
con tal de afectar a su prima, le cuenta a la villana sus sospechas
sobre una trampa que le quieren tender a su amante. Luego habla con
Raúl, con el que desea arreglar las cosas, pero él ha descubierto
que Cristina es el tipo de mujer con la que quiere estar y se lo dice
a la novia, con quien termina. Ivana se burla de él y arma tremendo
argüende a la otra, acusándola de ser, junto con su madre, una
vividora, arribista y aprovechada. Isabel, que se encuentra presente,
la abofetea.
Leonardo
se siente solo sin la presencia de Eugenia y también teme por la
vida de Dulce María, la cual luce cada vez peor e insiste en culpar
a Aura de lo sucedido a Gabriel, el cual no despierta del coma y es
cuidado por Esperanza, quien impide que la protagonista lo vea y por
ello discute con Jaime, a quien Julio pide perdón en nombre de su
hijo, revelando lo perturbado que este está. Jaime habla de esto con
Leonardo y Isabel, quien se lo cuenta a Cristina. Cuando esta última
es molestada por Ivana, enfurecer está por decirle la verdad pero la
repentina presencia de Mimí lo evita.
Aura
intenta a toda costa acercarse a Dulce María y esta le revela cuanto
la ha odiado toda su vida, por tener el favoritismo de la gente.
Confiesa que siempre fingió sus enfermedades y con ello atrajo la
atención de todos, hasta de Gabriel, con la única finalidad de
quitárselo. Tras revelarse el monstruo que es su hermana, Aura la
desprecia y se desahoga con sus tías. Ivana las interrumpe y le pide
que no sea hipócrita. Se hacen de palabras que terminan ante la
presencia de Julio, a quien Mimí presenta como un viejo amigo y ante
las otras y su hijo revela que el hombre es el verdadero padre de
Ivana, quien no puede soportar la idea de estar esperando un hijo de
su propio hermano. El padre le pide perdón y ella lo acusa de la
muerte del que siempre creyó su padre. Sufre, se desahoga con
Fabián, quien hace memoria y confiesa a Aura recordar que, cuando su
padre murió, vio una sombra desvanecerse por el balcón, por lo que
ahora está seguro de que Bruno estuvo allí aquella vez. Se pregunta
qué será de Claudio, esperando que este no padezca las ofensas,
maltratos y humillaciones del Escorpión y Jano, ignorando que estos
lo han vuelto su presa fácil.
Willy
molesta a Cristina y esta es defendida por Raúl, a quien el otro
provoca y amenaza con matarlo, asegurando que la muchacha es suya.
Esta suplica al ex que la deje tranquila y este acude a Bruno, al que
dice estar decidido a lo que sea con tal de que quite de su camino a
Raúl, al que Ivana busca con la finalidad de hacerle creer que el
hijo que espera es suyo y lo sorprende besando a Cristina. Para
herirla, delante de ella le dice al hombre la noticia. Él no le
cree, pues sabe que sostuvo un romance con Bruno, lo mismo que
Cristina, la cal se horroriza al descubrir que su enemiga espera un
hijo de su medio hermano. Hiere a Ivana con su consuelo, por lo que
la villana se marcha y llora en soledad.
Enrique
asegura a Santiago que Nubia es cómplice de Bruno y lo ha ayudado
con el fin de vengarse de él por despreciarla. El rptogonista
discute con la mujer, quien le ha tendido una trampa para seducirlo,
logrando que Aura los vea y discuta con él, exigiéndole que no la
busque más. La villana pide al hombre que se de cuenta que ellos
están destinados a estar juntos, mas él deja muy claro que su único
amor es Aura y luchará por ella. Pero la mujer lo rechaza y le exige
que se aleje de su vida, pues no le perdonará el haberla engañado,
como Gabriel, quien despierta del coma justo cuando Dulce María
tiene una crisis y es enviada al hospital, donde es sometida a una
operación que no soporta, perdiendo la vida.
Paulo
le cuenta a Esperanza sobre su homosexualidad, asombrándose cuando
ella le dice que siempre lo supo gay y lo apoya, aconsejándole que
recurra a lo que sea e intente acercarse a Fabián, pero este lo
rechaza y con dolor le cuenta a Santiago de la violación en la
cárcel. El amigo le aconseja visitar a un psicólogo que conoce y
así lo manda con Héctor Esponda, con quien comienza una terapia.
Nubia
presiona a Bruno para que mate a Aura, pues solo así ella podrá
recuperar a Santiago y gozar de su dinero. El villano la hace suya
apasionadamente y le revela que tiene en su poder una gran fortuna, y
que dentro de poco, cuando Aura Llerena lo haya perdido todo,
Santiago la aborrecerá. Sin embargo el millonario insiste para que
lo perdone y acude al entierro de Dulce María, donde Gabriel hace
acto de presencia, sintiéndose culpable y pidiéndole perdón a su
ex, quien le promete que estarán juntos. Esto hace que Santiago tome
la decisión de alejarse de ella.
Leonardo
se siente perdido y pide a Aura que se haga cargo de la compañía,
apoyada por Santiago y Fabián. A la mujer no le queda más remedio
que aceptar y al enterarse de esto, Bruno busca a Cristina para
amenazarla de muerte, a cambio de su ayuda. Ella se niega, y cuando
él la golpea, aparece Raúl para enfrentarlo a golpes, mientras la
otra llama a la policía. Bruno se da a la fuga nuevamente, pero jura
venganza. Sorprende a Cristina y Raúl en el departamento de él,
donde los amenaza con un arma con la que dispara al hombre, al que
mata, causando gran dolor a la pobre muchacha, a quien Willy busca
para hablarle de amor. Ella lo rechaza y cuando él se violenta,
intentando obligarla a irse con él, ella lo empuja de la acera y es
arrollado por un automóvil. Busca ayuda, pero es inútil, pues el ex
novio muere.
Aura
brinda su apoyo a Ivana y esta lo rechaza y se da a la tarea de verse
cara a cara con Bruno, al que dice saber que son hermanos. Lo
aborrece por haberla utilizado y él solo se burla de ella,
asegurando que Mimí no era más que una cualquiera. Ivana intenta
abofetearlo, él la detiene, la lastima y la ofende, echándola de su
casa como una basura. La despechada chica contacta a la policía y
les dice el paradero del malhechor, el cual la sorprende y la
estrangula con sus manos, jurando que destruirá uno a uno a todos
los Llerena.
La policía tiende una emboscada a Bruno y lo
capturan luego de una persecución, mientras que Mimí se derrumba al
saber que su hija ha muerto. Es apoyada por Isabel, quien da aviso a
Leonardo y le revela la verdad sobre Bruno. El hombre va en busca de
su hermana, le da consuelo, y la consuela cuando ella se siente
responsable de las desgracias de su familia, pues si no hubiera amado
a Julio, sus vidas serían otras.
Enrique
se acerca a Cristina, descubriendo en ella a una mujer frágil pero
amorosa y con muchas virtudes. Esto llena de alegría a Isabel, quien
espera que su hija ponga los ojos en un hombre como él, que ha
conocido el sufrimiento, el arrepentimiento, y ha resurgido como ave
fénix. La chica sin embargo cree que Enrique solo la ve como una
amiga y que ella nunca tendrá oportunidad con ningún hombre.
La
desgracia de los Llerena hace que Gabriel y Aura estén unidos,
incomodando esto a Esperanza, quien no baja la guardia y los vigila a
ambos. Nubia se vale de esto para sembrar dudas en Santiago, quien
lleno de celos solo busca la oportunidad de provocar a la mujer en
toda ocasión, causando esto constantes discusiones que los lastima
cada vez más. Sin embargo sufren, pues se aman y no soportan estar
peleados.
Bruno
está en la mira del Escorpión y Jano, ante los cuales se muestra
arrogante y altanero. Luego el villano firma un poder a Nubia, a la
que propone que estén juntos y entre ambos destruyan a los Llerena,
siendo ella su mano derecha ya que él está en prisión. Lo que él
no sabe es que, ante los desprecios de Santiago, la mujer se ha dado
cuenta de que este nunca le corresponderá y decide traicionarlo,
huyendo al extranjero. Cuando al paso de unos meses, el villano se
entera de que está en la calle, gracias a Julio, quien se lo dice
cuando lo visita en la cárcel, donde además sufre los acosos de
Jano y el Escorpión, negándose a ser su juguete nuevo y donde
Claudio lo alerta de las intenciones de los criminales, quien a este
último tienden una trampa y El Escorpión logra violarlo, causándole
profundo dolor. Esto hace enfurecer a Bruno, quien enfrenta al
violador y le deja claro que no permitirá que se meta con él ni con
su “amigo”. El criminal sin emabrgo se ríe de él y le tiende
una trampa en las regaderas, donde es sorprendido por Jano, el cual
lo toquetea. Bruno reacciona y con fuerza le azota la cabeza contra
la pared, hasta matarlo, dehando claro que con él nadie se mete. Se
atormenta al pensar que ha quedado en la ruina, así como en las
palabras que su padre le dijo: que su venganza era inútil, pues así
como Ivana, él era también un hijo bastardo, ya que tuvo otra
familia, la cual murió, como un castigo. El villano descubre
entonces que su madre siempre lo manipuló y que lo utilizó para
llevar a cabo una venganza inútil, ya que en realidad la mujer fue
también amante de su padre. Sufre, se siente estúpido y la maldice.
Luego es enviado a una celda de castigo por el crimen que ha cometido
y esto llena de rabia al Escorpión, el cual toma represalias contra
Claudio, al que viola cruelmente y convierte en su esclavo de todo
tipo, bajo amenazas y golpes.
Gabriel
pide a Aura que se casen, pues nunca debieron separarse, y ella se lo
cuenta a Cristina, quien pide a Santiago que haga algo para
recuperarla. Este solo se presenta ante la mujer para ofenderla y
desearle que sea feliz, desahogándose después con Fabián, el cual
habla con su prima y le hace saber que el hombre la ama de verdad.
Tiempo
después: Leonardo regresa a la compañía, donde pide a Aura y
Fabián que sean su apoyo, ya que al final ambos quedarán a cargo
del emporio familiar. El sobrino a su vez tiene un enfrentamiento con
Paulo, quien lo ama y le exige que le diga por qué lo rechaza.
Fabián le cuenta la verdad y el chico intenta abrazarlo, pero es
rechazado y luego descubre que su amado está saliendo con Héctor,
su psicólogo.
Julio
está más cerca de Mimí, a la que propone que sean felices. Ella lo
rechaza, pues no podría vivir con la persona por la que se hizo
tanto daño a su familia, y que igual es el padre del asesino de su
hija. Julio sufre y va a la prisión a visitar a Bruno. Allí se
entera de que este ha escapado. Y es que el villano ha decidido
vengarse de Nubia, a la que encuentra en Texas y sorprende en su
departamento, donde le corta la garganta. La policía lo persigue y
muere en un tiroteo, resistiéndose a ser nuevamente capturado.
Esperanza
pide a Gabriel que reflexione y se de cuenta de que será infeliz al
lado de Aura, pues esta ya no lo ama y lo mantiene a su lado solo
como un capricho. Él no reacciona hasta que Cristina le hace que la
protagonista se siente presionada por él pero en realidad ama a a
Santiago. Le suplica que se olvide de ella y no intente recuperar lo
que despreció para estar con Dulce María, con quien vivió un
matrimonio fugaz e infeliz. Gabriel habla de esto con su padre y su
hermano, quienes apoyan lo que Cristina piensa. Por eso el artista
acepta el trabajo en el extranjero y se marcha sin decir adiós a
nadie más que a los suyos. Cuando Aura se entera, sufre. Intenta
desahogarse con Santiago pero él la rechaza, asegurando que no es
plato de segunda mesa.
Isabel
hace saber a Leonardo que se irá de su casa, pues finalmente sin la
presencia de su hermana, ella ya no tiene nada qué hacer allí. El
hombre la toma de las manos, le pide que no se marche, que se quede,
y que sea para Aura como una madre y Cristina sea como una hermana,
pues se sentirían muy solos sin ella y su hija. La muchacha apoya a
su padre y convence a la tía de no irse. Luego alienta a Cristina
para que se de una nueva oportunidad en el amor, llenándose de paz
al saber que Bruno está muerto. Cristina duda en que un día pueda
ser feliz, pero Enrique finalmente se atreve a invitarla a salir.
Ella se resiste pero llega a un acuerdo con Fabián: Ella saldrá con
el hermano de Santiago si él acepta salir con Paulo. Lo hacen y el
gay se sorprende cuando al visitar un restaurante, acompañado por su
pretendiente, ve a Héctor besándose con otro. No lo enfrenta, pero
se aleja de él para siempre y se da una oportunidad con el joven y
ardoroso Paulo.
Aura
se siente sola y Leonardo la alienta para que deje el orgullo y la
soberbia atrás y trate de ser feliz con Santiago, con quien él ha
terminado negociaciones en buenos términos y se irá del país. Esto
es apoyado por Jaime, quien hace saber a la mujer que el hombre la
ama y que, si se va, es para olvidarla. Aura no puede soportar la
idea de perder su amor y acude a buscarlo al aeropuerto, donde le
pide perdón por ser orgullosa y le revela que lo ama casi desde el
instante en que lo conoció. Él le ofrece que lo acompañe y en un
arrebato para decididos a estar juntos para siempre, ella acepta,
escapándose a una playa donde por fin consuman su amor y ella se
entrega a él, con su piel de ángel.
FIN